Gorda, gorda y gorda, y por mil veces que me lo repita y aunque estoy convencidísima de que no lleva connotaciones negativas, la gente se empeña en sustituirla con palabras como: “es rellenita”, “es gordita”, “es grande”, “es de hueso ancho”, “es su genética”… ¡WTF! ¿Pero en qué momento esa palabrería barata empezó a usarse por favor? Joder, di gorda, que no pasa nada. ¡Que no se acaba el mundo señores! Q ue echáis humo por el cerebro intentando buscar una palabra sustituta, ¡Que no estáis nombrando al anticristo! Madre mía… loading... Está claro que, aunque quede mucho camino por recorrer, los movimientos “body-positive”, las chicas “curvy”, los chicos “fofisanos”, han pisado muy fuerte los últimos años, y es más, me atrevería a decir que están de moda. (Un hurra por mis mollas ¡HIP! ¡HIP! ¡HURRA!) Y sí; desde que se empieza a entender que, estar gorda no es sinónimo de dejadez, ni de no haber hecho ejercicio ni ninguna de esas chorradas; la soci...